Descripción
La cistoscopia es un procedimiento médico que se realiza para examinar el interior de la vejiga urinaria. Durante la prueba, se introduce un tubo delgado y flexible llamado cistoscopio a través de la uretra hasta llegar a la vejiga. El cistoscopio contiene una pequeña cámara que envía imágenes en tiempo real a una pantalla, lo que permite al médico examinar el interior de la vejiga y detectar posibles problemas, como inflamación, tumores o cálculos.
El procedimiento se realiza con anestesia local y generalmente se completa en unos pocos minutos. Los pacientes pueden experimentar cierta incomodidad o dolor leve durante el procedimiento, así como una necesidad urgente de orinar después de que se retire el cistoscopio. Sin embargo, estos efectos secundarios son temporales y desaparecen rápidamente después de la prueba.